Muchas veces intentando encontrarla pensando en el dinero o irnos de compras, cuando en realidad la felicidad es una actitud que está dentro de nosotros mismos
¿Te has puesto a pensar que, a pesar de los extraordinarios avances tecnológicos y científicos logrados por la humanidad, cada vez existen menos personas felices? ¿no será que con esa idea de la globalización estamos graduándonos en maestría sobre el mundo?¿qué tal que, sin quitarle la importancia que tiene la ciencia y la tecnología en la vida actual, nos ocupáramos un poco más de los recursos humanos y espirituales’ ¿qué pasaría si atendiéramos nuestra riqueza espiritual con el mismo ahínco con que lo hacemos por lo material? ¿cómo podríamos lograrlo?
Yo propongo que empecemos por el conocimiento de nuestras emociones y actitudes. Indaguemos de manera sincera y valiente acerca d qué deseamos en realidad. Sin duda, mucha gente, tiene la idea de que la felicidad cosiste en comprar cosas, tener dinero para adquirir esto o aquello, y por supuesto, esto nos pone contentos a todos, pero por lo regular solo se trata de un gusto pasajero, que en muchos casos dura unas cuentas horas y no trasciende porque más tarde te volverá a invadir ese sentimiento de vacío, es entonces cuando debes detenerte a reflexionar.
La felicidad no es un artículo de consumo sino una postura ante la vida, un estilo de existencia, una visión de la realidad, es vivir intensamente el presente y valorar la magia de lo cotidiano, despreocuparnos por el futuro sin atormentarnos por el pasado.
Todo lo que te digo, créeme no tiene gran ciencia ni se requiere de un doctorado en psicología para entenderlo. Consiste simplemente en una actitud sensible ante la vida y en alejarnos un poco de patrones que adormecen nuestro espíritu, como son las rutinas de levantarnos, irnos al trabajo, hacer la tarea del hogar, ver la tele, dormir y repetir lo mismo día tras día como robots.
El problema no es lo que hacemos, nuestro empleo o la familia que tenemos sino la forma como nos relacionamos con todo esto. Una actitud humilde, entregarse a los demás, aprender del sufrimiento, amarse a uno mismo y recuperar la capacidad de asombro ante la eterna creación, enriquecerá nuestra vida interior y la que compartimos con los demás.
2 comentarios:
La felicidad es cuestion de tener una buena actitud..como lo es en todas las areas de la vida.
Un claro ejemplo para mi son los monjes budistas que viven una vida plena llena de meditacion y con lo suficiente para comer en el dia. Como tu dices, muchas personas buscan la felicidad a traves de las cosas materiales...cosa que para mi es una locura porque siempre que consigues algo, algo mejor sale, y asi comienza un circulo viciozo. La felicidad esta dentro de uno mismo, es cuestion de encontrar algo que ya tenemos pero hemos olvidado.
Gracias por tu articulo
De acuerdo con Lucho... La felicidad la construímos nosotros mismos cada día, la felicidad consiste en buscar la paz en todo... Los problemas siempre estarán, pero nos ayudan a escalar, a pasar a otro nivel, a desarrollar nuestras hablidades y talentos y adquirir sabiduría. Pero lo más importante, la felicidad se haya en Diosy en amar a los demás! un saludo
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