No tengo tiempo

¿Sabes hijo mío? Hasta hoy no tuve tiempo para jugar contigo. Encontré tiempo para todo, menos para verte crecer… Nunca jugué contigo. Siento que tu merodeas, pero ¿Sabes? Soy muy importante y no tengo tiempo… Soy importante para números… invitaciones sociales… una serie de compromisos ineludibles, y dejar todo eso… ¿Para sentarme en el suelo contigo?... No, no tengo tiempo.

Un día viniste hasta mí con el cuaderno de la escuela… ni te miré… seguí leyendo el diario, a fin de cuentas, los problemas internacionales son más serios que los de mi casa… nunca vi tu boletín, ni se quién es tu maestra… no se bien cual fue tu primera palabra…también tu me entiendes, no,no tengo tiempo.¿De que sirve saber las mínimas cosas de ti si tengo otras grandes cosas que saber?... ¡hombre cómo has crecido!... Ya superaste mi cintura…estás alto, no me había dado cuenta…es que por otra parte, no advierto casi nada, mi vida es una carrera y cuando tengo tiempo, prefiero pasarlo fuera, y si lo paso aquí, me pierdo enmudecido frente a la televisión, porque la televisión es importante y me informa mucho.

¿Sabes hijo mío?... la última vez que tuve tiempo para ti, fue una noche, nueve meses antes de que tu nacieras… ¡Hombre! Se que te quejas, se que sientes la falta de una palabra, de una pregunta mía, de que corramos, que de un puntapié en tu pelota… pero es que no tengo tiempo… se que sientes la falta de un abrazo y de la risa… de ir a pie a comprar caramelos, de caminar hasta el kiosco a comprar el Pato Donald,… ¿pero sabes cuanto tiempo hace que no voy a pie por la calle?... No tengo tiempo…  tu entiendes, soy un hombre importante, tengo que atender a mucha gente, dependo de ellas…

Hijo tu no sabes nada de negocios. En realidad soy un hombre sin tiempo. Yo se que te disgustas por las pocas veces que hablamos… es un monologo… solo yo hablo. Y casi siempre es discusión. ¡Quiero silencio!. ¡Quiero tranquilidad!. Y tu..-tu tienes la pésima costumbre de venir corriendo y echarte encima de uno. ¡Tienes la manía de saltar a los brazos de la gente ¡ Hijo no, no, no tengo tiempo para abrazarte. No tengo tiempo para hablar con niños así, sin ton ni son porque…¿Qué entiendes tu de computadoras, comunicación, cibernética, racionalismo, informática… como puedo detenerme a conversar contigo?..

¡Sabes hijo entonces!.. No tengo tiempo
Pero lo peor de todo…lo peor de todo es que si murieras ahora… ya en este instante, me quedaría con un peso en la conciencia, porque hasta hoy no encontré tiempo para jugar contigo, y en la otra vida seguramente... Dios, no tendrá tiempo de dejarme al menos... verte
Luis Gerardo Tovar/Poeta-Actor-Locutor(+)

No hay comentarios: